A veces el hombre más pobre deja a sus hijos la herencia más rica.
Ruth E. Renkel
Ruth E. Renkel
Papá, papi, papuchi... Diferentes palabras para describir a una de las personas mas importantes en mi vida, pero mi preferida siempre será papito. Miró atrás y me doy cuenta de que la mayoría de mis recuerdos los llenas tú, desde aquellos días de invierno jugando con la nieve, asta días tontos discutiendo.
No será la primera vez que nos digan que somos iguales, y espero que tampoco la última. Y eso me gusta. Porque ¿hay mayor honor que parecerte a aquella persona que hace lo imposible para que tu seas feliz?
Se que siempre seré tu pequeña, que él deber de un padre es protegerte durante la infancia, aconsejarte en la adolescencia y juventud, y acompañarte en la adultez. Y sinceramente has cumplido con creces todos tus deberes.
No hay duda de que ser padre es complicado, que hay veces que la impotencia y el cansancio se apoderan, que he sido una niña difícil y cabezota. Espero que estés orgulloso de en lo que me he convertido y si soy así nunca te olvides de que a sido gracias a ti, que me formaste como persona.
Esperó que siempre irradies esa alegría que te caracteriza y quiero que sepas que te quiero.
PARA TI PAPÁ.
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